Me gusta andar en bici porque es un placer infantil
Me gusta tumbarme en el sofá y dejar pasar el rato porque eso quiere decir que dispongo de mi tiempo
Me gusta rascarme los ojos con el dorso de la mano, como los bebés
Me gusta la educación que me han dado mis padres
Me gusta Goya porque es más actual que Picasso
Me gustan los recuerdos que tengo de mis abuelos
Me gusta la ópera y los gordos italianos que la cantan
Me gusta que mi vida sea un río que va dar a la mar pero no me gusta que la mar sea el morir
Me gusta guardar las cosas que me gustan
Me gusta Homero, que es mi padre, y me gusta la tradición judeocristiana, que es mi madre
Me gusta que a mis sobrinos les guste jugar conmigo
Me gusta la música Rock porque suele estar hecha con el corazón
Me gusta acostarme y soñar
Me gusta Fellini porque era un soñador
Me gusta ver a mi hijo porque algo mío sobrevive en él
Me gusta lo que me emociona
Me gusta imaginar que algún día seré tan cool como Sinatra
Me gusta como fue mi infancia
Me gusta pensar que algún día tendré un piano de cola y, además, sabré tocarlo
Me gustan las maderas rotas de las barcas que llegan a la orilla porque guardan recuerdos de su vida anterior
viernes, 30 de abril de 2010
miércoles, 28 de abril de 2010
Buen tiempo
sábado, 17 de abril de 2010
martes, 13 de abril de 2010
Bien por Flecha

El Infierno del Norte, la Reina de las Clásicas...cualquier apelativo hace justicia a la que posiblemente sea la carrera de un día más dura del mundo. Un recorrido absolutamente llano pero cuyas secciones de adoquín machacan el cuerpo de los ciclistas hasta el límite.
Cancellara ha demostrado que, en este momento, es imbatible en cualquier clásica dura y larga que corra; está en la mejor forma de su vida y todavía más fino que en el pasado Mundial cuando arrasó en la crono. Desde el momento en que atacó en la Roubaix del domingo pasado ya se veía que nadie tenía esa fuerza ni esas piernas.
Flecha ha estado soberbio y ha repetido podium. Quizá hubiese subido al segundo escalón si Hushovd no le hubiese engañado diciéndole que tenía calambres y no podía dar relevos para luego sprintarle miserablemente; un detalle feo e impropio de un gran ciclista como es el noruego.
En definitiva, Flecha haciendo historia en las clásicas del Norte. Un auténtico pionero dentro de un ciclismo español demasiado concentrado en las grandes vueltas, especialmente el Tour.
El año que viene el arquero volverá a intentar ser el primero en el mítico velódromo francés...¡ojalá!
Subo una bonita imagen de Flecha hacia la victoria en la Het Nieuwsblad (antigua Het Volk) de este año.
martes, 6 de abril de 2010
Retales y parches
jueves, 1 de abril de 2010
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